31 julio 2007

¡Hasta luego! Sevilla...

El bronce de la monarquía y la Almudena

Cuando Juan Pablo II consagró la catedral de Santa María la Real de la Almudena el 15 junio de 1993 estaba a falta aún de muchos detalles. Tantos faltaban que hasta la boda del Príncipe de Asturias no se ha remozado por completo ya en el 2004. Cuando vino el papa no estaban ni las puertas definitivas. Para mi gusto las puertas actuales son lo más destacable de la catedral. Por la iconografía, por las dimensiones, por lo novedoso y por lo que representan. Son obra de Luis A. Sanguino. Las puertas de bronce de la fachada que da a la calle Bailén representan: la lateral de la izquierda, el hallazgo de la Virgen de la Almudena por el Rey Alfonso VI de Castilla, en el año 1085; la central, recuerda el día de la inauguración de la Catedral por el Papa Juan Pablo II, con imágenes de los Reyes, Doña María de las Mercedes, madre del Rey, y el entonces Cardenal Arzobispo de Madrid, Ángel Suquía; y la puerta lateral derecha, representa la procesión de la Virgen de la Almudena el 9 de noviembre, día de su fiesta, por las calles de Madrid. En ella se ve al actual Cardenal Arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, y los monumentos más emblemáticos de la ciudad. La fachada que da a la plaza de la Armeria, frente por frente al Palacio Real, tiene a su vez tres puertas. La central tiene adornos con el tema trinitario, ante lo que fue el Nuevo Milenio del 2000; la puerta del Evangelio hace referencia a la Monarquía católica de España, con efigies de los reyes desde la Reconquista; la puerta de la Epístola está dedicada a la evangelización de Hispanoamérica. El recorrido por sus puertas es una catequesis sobre la devoción a la Virgen de la Almudena y un repaso y homenaje a la Monarquía que tanto tuvo que ver con la cosntrucción de este templo.

Puerta central de la calle Bailén. Representa la consagración del templo el 15 de junio de 1993.


Puerta central a la plaza de la Armeria. La Virgen de la Almudena bajo la Trinidad acompaña al pueblo de Dios en el Jubileo del III Milenio.

La puerta del Evangelio está dedicada a la Monarquía española desde los tiempos de la reconquista.


Detalle 1: Felipe II aparece junto a la obra arquitectónica cumbre de su reinado, el Monasterio de San Lorenzo en El Escorial.

Detalla 2: Alfonso XII aparece abatido y arrodillado ante la pérdida de su esposa. La reina María de las Mercedes aparece en actitud de abrazar la resurrección de Cristo.

Detalle 3: Sobre el Palacio Real aparecen sus moradores. El primero que lo habitó fue Carlos III y el último Alfonso XIII y Victoria Eugenia. Además aparece la reina Maria Cristina, la soberana que más tiempo vivió en él, unos cincuenta años.

Detalle 4: En la puerta principal de la calle Bailén aparecen los actuales reyes de España. Juan Carlos y Sofía presencian bajo un dosel la ceremonia de consagración de la catedral.

27 julio 2007

San Francisco el Grande

Esta basílica madrileña ha vivido de todo a lo largo de su historia. Cuenta la tradición que en sus inmediaciones un santo, el propio San Francisco de Asís, plantó una choza en su peregrinar hacia Santiago. Aquella choza del siglo XIII deribó a ermita y más tarde a convento franciscano. La remodelación ilustrada madrileña de Carlos III la quiso hacer basilica. Varios proyectos de planta circular y gran cúpula. Fue Sabatini, el mismo que realizaba el Palacio Real, quien la culminó en 1776. Desde entonces ha pasado casi de todo por allí. En ella se han celebrado numerosas celebraciones de la corona. Con la invasión francesa el general Murat se acuarteló entre sus muros. El rey Pepe Botella la quiso convertir en Salón de Cortes. También sufrió las desamortizaciones. Su uso va desde hospital hasta un proyecto para hacerlo Panteón Nacional. En 1926 Alfonso XIII cede el edificio nuevamente a los franciscanos y en la década de los 60 se consagra a la Virgen de los Ángeles, es entonces, cuando Juan XXIII la convierte entonces en basílica menor. Por sus proporciones y diseño artístico bien puede ponerse al lado de las grandes iglesias romanas. Su cúpula domina el horizonte madrileñó desde el Manzanares. Ya Goya dejó constancia de ello en su cuadro La pradera de San Isidro. Para los amantes del cuore hay que apuntar que en ella contrajo matrimonio en 1974 el torero Francisco Rivera, Paquirri, con Carmen Ordoñez.

25 julio 2007

La Roldana, exponente del barroco andaluz

No sabemos cómo era el rostro de quien tantos semblantes talló, no ha pasado a la posteridad. Sólo su nombre y su obra. No conocemos la cara de Luisa, la hija de Pedro Roldán. En el taller de su padre forjó el oficio que le dió fama más allá de Andalucía. Podemos jugar a imaginar como sería aquella mujer que se abrió camino en una época difícil de claroscuros. Quizás fuera morena, como el tópico de mujer andaluza, y sus cabellos ondulados como esas melenas que plasmó al viento en la madera. Mujer de carácter y fuerza como para ser alguien en un mundo de hombres y destacar con su arte. Obstinada en sus decisiones fue capaz de casarse pese a la oposición familiar. Este dato nos refleja lo arriesgado de su persona. Su personalidad unida a su destreza en el arte de dar vida a la madera y el barro le hizo encumbrarse en la cúspide del arte de su tiempo. En la Corte llegó a ser la única mujer escultora de cámara de los reyes Carlos II y Felipe V.

Muchas han sido las obras atribuidas a quien pasó a la historia como la Roldana. De estas atribuciones muchas caen por su propio peso. Si se compara la Soledad de Puerto Real, la única dolorosa documentada, con la más universal de las atribuciones, la Esperanza Macarena, la cuestión es clara... Que cada cuál saque sus conclusiones dice el director de la muestra que ahora se dedica a Luisa en Sevilla.

Su obra se desparrama por Sevilla, Córdoba, Cádiz y Madrid. Una selección de ellas puede verse hasta octubre en los Reales Alcázares con motivo del III Centenario de la muerte de la Roldana, dentro del ciclo Andalucia Barroca. En total se exponen treinta y una esculturas. De estas obras, veinticuatro corresponden a la propia Luisa Roldán, dos esculturas se consideran de Pedro Roldán con la intervención de su hija: San Fernando de la Catedral de Sevilla y el Ángel de la Oración en el Huerto de Monte-Sión. Además se exponen cinco obras más de Pedro Roldán coetáneas a la actividad de la Roldana en Sevilla. De su época madrileña destacan misterios de la vida de la Virgen en pequeña escala. En la exposición se exhiben de forma secuencial: desde el nacimiento de la Virgen con San Joaquín y Santa Ana, pasando por la iniciación a la lectura para llegar a las famosas Vírgenes de la leche, María amamanta a Jesús. De Cádiz sobresalen sus patrones, San Germán y San Servando, y un Ecce Homo.

Luisa Roldán murió, después de hacer declaración de pobreza, el 10 de enero de 1706 en Madrid y fue enterrada en secreto. Paradójicamente disfrutó de gran reconocimiento social y artístico en vida, siendo significativo que el mismo día de su muerte la Academia de San Lucas de Roma la nombraba Académica.


San Germán y San Servando. Patronos de Cádiz


Ecce Homo. Catedral de Cádiz


Nió Jesús con la cruz a cuestas


Detalle. Ángel junto a globo terraqueo


San José y Niño Jesús

Ángel entrega Niño Jesús a María

21 julio 2007

El ángel caído

"Por su orgullo cae arrojado del cielo con toda su hueste de ángeles rebeldes para no volver a él jamás. Agita en derredor sus miradas, y blasfemo las fija en el empíreo, reflejándose en ellas el dolor más hondo, la consternación más grande, la soberbia más funesta y el odio más obstinado" Estas palabras extraídas del Paraíso perdido de John Milton inspiraron a Ricardo Bellver la creación de este ángel caído. El único monumento levantado a Lucifer se encuentra en los jardines del Buen Retiro en Madrid desde su inauguración en 1885. Fue fundido en bronce en París para la Exposición Universal de 1878.

20 julio 2007

Capillitas en los madriles

En mi periplo madrileño por la villa y corte, y en mi afán de ver lo máximo en el mínimo tiempo fui a dar en la calle Toledo con la Iglesia Colegial de San Isidro, un templo que hizo las veces de catedral hasta que Madrid inauguró la Almudena. Para mi gusto no te pierdes nada si no llegas a conocerla, oscura, gris y añeja poco llama la atención para andaluces que están acostumbrados a grandes templos barrocos. Sus capillas con retablos de escaso valor y vírgenes y santos de serie, de gran valor devocional pero de discreto mérito artístico que poblaron las iglesias tras la Guerra Civil. Lo que más me sorpendió fueron tres capillas en hilera. En una la Virgen de los Reyes, patrona de Sevilla. En la contigua la Macarena y justo al lado El Gran Poder. Ni que decir tiene que son copias o más bien insinuaciones de la original. Pero dejando este aspecto a parte, para un sevillano, llena bastante de alegria encontrarse en plena capital de España con sus devociones más universales.

19 julio 2007

Egipto en la capital de España

No es el Nilo, ni este templo está en el país de los faraones, el agua más cercana que corre es la del río Manzanares, que no es la de este estanque en el Parque del Cuartel de la Montaña. Muy cerca de la madrileña plaza de España encontramos el templo de Debod. Fue un regalo de Egipto a España por su colaboración prestada en el llamamiento internacional que realizó la Unesco en 1968. Los templos de Nubia estaban en peligro, especialmente el de Abu Simbel debido a la construcción de la presa de Asuán. Los países colaboradores fueron Estados Unidos, Holanda, Italia y España. Egipto mostró su gratitud regalando a cada nación uno de los templos salvados. A España viajó este de Debod y fue inaugurado en este céntrico emplazamiento en 1972. Tiene más de dos mil años. La parte más antigua fue levantada bajo el reinado de Ptolomeo IV Filópator, y decorado posteriormente por el rey nubio Adikhalamani de Meroe hacia 200-180 aC, dedicado a Amón de Debod y a Isis. Posee importantes añadidos de época ptolemaica y romano-imperial (del siglo I aC al II dC). El edificio conseva la misma orientación en la que fue construido, este-oeste. El interior se ha acondicionado ocn las más modernas técnicas museísticas para que el visitante comprenda el edificio y la cultura de la época de los faraones.

Los pilonos de acceso al templo se encuentran sobre una plataforma de piedra rodeada de agua. El estanque recuerda las aguas del Nilo del emplazamiento originario.


En época romana se le añade a la fachada del templo las cuatro columnas de orden floral. Fue un importante centro de peregrinación, íncluso el propio Augusto llegó a Debod.

18 julio 2007

La Duquesa de Alba y la Beata

De mi visita al Museo del Prado me traigo a casa este cuadro de Goya. Entre tanto formalismo en la galería de retratos oficiales me sorprendió esta escena pintoresca. Goya recoge a la XIII duquesa de Alba, María del Pilar Teresa Cayetana de Silva y Álvarez de Toledo y Silva Bazán, mostrando a una de sus camaristas, Rafaela Luisa Velázquez, un amuleto de coral. Este objeto protege contra el mal de ojo y hace que la beata se defienda con una cruz como si se tratara de una peligrosa aparición diabólica. La beata era víctima de constantes bromas por parte de la duquesa.

17 julio 2007

Madrid a vista de pájaro

Otra dimensión distinta puede apreciarse de Madrid desde arriba. La Catedral de Santa María La Real de la Almudena permite la visita turistica a su cúpula, igual que quien viene a Sevilla y sube a la Giralda o aquel que va al Vaticano y divisa Roma desde la cúpula de San Pedro. A la de la Almudena se sube por ascensores, mucho más cómodo para el sufrido turista que todo lo quiere ver que las almohades rampas de la Giralda, no en vano de una cosntrucción a otra han pasado la friolera de ocho siglos. Una vez en la cúpula podemos ver unas maravillosas vistas de la capital de España. A sus pies el Campo del Moro, el Palacio Real, la calle Bailén o San Francisco El Grande. Sin duda, una oportunidad para apreciar las dimensiones de la ciudad.


La cúpula de San Francisco El Grande se impone
en la geografía urbana madrileña.

Zona sur este de Madrid vista
desde laCatedral de la Almudena.
Sobresale a la izquierda el Teatro Real y más a la derecha
uno de los edificos de la Gran Vía.

Al fondo el famoso Pirulí de Torre España.
Abajo la calle Bailén.
Se aprecian las torres y cúpula de la Colegial de San Isidro.
La zona sur este de la capital llena de bloques de viviendas
y zonas verdes.

11 julio 2007

The convent and the King´s Chapel

Los andaluces podemos paladear el Reino Unido a un paso de nuestra casa. Desde Sevilla sólo basta recorrer 200 kilómetros. Justo en la punta de Europa, encontramos el Peñon y bajo él Gibraltar, la colonia británica que aún persiste bajo dominio de la corona inglesa. Tres siglos de ocupación británica que han dejado huella y han imprimido caracter. La fisonomía de la ciudad, su urbanismo, sus construcciones y sus gentes con su forma de vivir. Todo sorprende al visitante porque retrotrae en pequeña escala a las ciudades y pueblos británicos. Las casas, las tiendas, las cabinas de telefono, los materiales constructivos... Nada que ver con las poblaciones cercanas: Los Barrios, San Roque, la Línea... Sin duda, un destino distinto y atípico en la ruta por la provincia de Cádiz.

The convent and the King´s Chapel forman parte del mismo edificio. La casa del gobernador y la capilla. Es conocida como de The Convet porque originariamente fue un convento franciscano en el siglo XVI. Desde finales del primer tercio del siglo XVIII es sede del gobernador de la colonia y la capilla es usada desde la ocupación británica por la guarnición allí destinada. En ella están enterrados dos de los primeros gobernadores de la colonia.

Una gran vidriera llena todo el presbiterio acopañada de banderas antiguas. La leyenda y tradición reconoce a la dama gris. El fantasma de una antigua monja pulula por The convent como perro por su casa.






05 julio 2007

De nuevo el tranvía en el centro de Sevilla


Aunque está en periodo de pruebas y circula a una velocidad más reducida que cuando transporte a viajeros en un futuro próximo, el Metrocentro ya está presente en la ciudad. Con una estética más acorde a estos tiempos vuelve el tranvía a las mismas calles por las que dejó de circular hace décadas. Un sonido inusual: una campana que avisa, un ruido más leve que el del despegue del avión aunque un poco parecido, anuncia el discurrir del tranvía por las vías y catenarias de la calle San Fernando. Ya veremos como funciona cuando lo usemos a diario, si responde a las espectativas de sus creadores. Ahora..., un juguete en pruebas para los ojos de los curiosos, algo nuevo que irrumpe con potencia en nuestro centro más histórico.