De mi visita al Museo del Prado me traigo a casa este cuadro de Goya. Entre tanto formalismo en la galería de retratos oficiales me sorprendió esta escena pintoresca. Goya recoge a la XIII duquesa de Alba, María del Pilar Teresa Cayetana de Silva y Álvarez de Toledo y Silva Bazán, mostrando a una de sus camaristas, Rafaela Luisa Velázquez, un amuleto de coral. Este objeto protege contra el mal de ojo y hace que la beata se defienda con una cruz como si se tratara de una peligrosa aparición diabólica. La beata era víctima de constantes bromas por parte de la duquesa.
4 comentarios:
qué japutilla tenía que ser la duquesa...
A ver si la próxima vez en vez de tanto Rodilla y Tony Ronalds vamos al Prado. Por cierto, ¿has visto la ampliación? ¿Qué te ha parecido?
Mi visita al Prado se centró sólo en Goya y Velázquez. Tú sabes, yo en busca de la realeza perdida
Goya representa magistralmente la contaposición de la juventud y de la vejez.
http://ruerepublique.wordpress.com/2011/08/27/tempus-fugit/
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